Prevenir y mejorar la alergia a los caballos
Prevenir y mejorar las alergias a los caballos
Sin duda, el abordaje ideal de la alergia es evitar el alérgeno, que es la sustancia que está provocando la reacción en tu mascota, ya que este no requiere medicación y los síntomas desaparecerán. cuando se elimina el alérgeno. Sin embargo, esto rara vez es posible, ya que la mayoría de los alérgenos del medio ambiente son imposibles de evitar. Además, la mayoría de los animales "atópicos" son alérgicos a varias sustancias al mismo tiempo.
¿QUÉ ES LA ALERGIA EN LOS CABALLOS?
La alergia se caracteriza por una respuesta inmune desproporcionada, el cuerpo se defiende contra un elemento de su entorno que normalmente toleraría sin reaccionar. El sistema inmunológico "se equivoca" al considerar algo que no es agresivo, y comienza a luchar contra él, desarrollando todos los mecanismos de inflamación. Muy a menudo, el alérgeno en cuestión es un grano de polen, un ácaro o un moho. Pero para los caballos alérgicos, estos elementos desencadenan una reacción de las defensas que es demasiado importante y perjudica al propio organismo. Abedul, un árbol cuyo polen es uno de los primeros en aparecer a principios de la primavera y muy a menudo implicado en la alergia al polen.
ALÉRGENOS
Como se explicó anteriormente, los alérgenos son elementos que pueden desencadenar síntomas en caballos que tienen un organismo predispuesto y están en riesgo de manifestar síntomas. Distinguimos: Alérgenos respiratorios, que ingresan al organismo a través del tracto respiratorio: polen, mohos Alérgenos alimentarios, que se ingieren: depende del caballo, puede ser cualquier alimento, pero algunos son más comunes que otros ( en caballos encontramos maíz, soja, etc.). Alérgenos de contacto: a través de la piel, a través de la piel, como algunas plantas, donde todo lo que se necesita es un contacto para desencadenar una reacción. Alérgenos inyectados: esta categoría incluye todos los venenos, abejas, avispas, tábanos, pero también mosquitos Culicoides responsables de la conocida dermatitis alérgica equina recurrente (DERE) y los temidos choques anafilácticos relacionados con las alergias a medicamentos.
SÍNTOMAS DE ALERGIAS EN CABALLOS
Las reacciones se expresan a través de 4 medios:
- LA PIEL :
Lesiones de urticaria (hinchazón subcutánea sin heridas, la piel permanece intacta) o dermatitis tipo eccema (lesiones cutáneas más superficiales, con pequeñas heridas o costras, la piel está dañada y granulosa).
- LOS PULMONES :
Inflamación crónica, pulmones llenos de moco, tos e intolerancia al esfuerzo, y tendencia a los espasmos bronquiales que dan lugar a síntomas asmáticos.
- EL SISTEMA DIGESTIVO:
Digestión difícil, con diarrea, cólico sordo (dolor abdominal), mala forma, fatiga, pérdida del apetito, pérdida del tono.
- LOS OJOS :
Ojos llorosos, reacciones anafilácticas parecidas a un shock. La ruta de entrada del alérgeno no tiene que influir en los síntomas: un alérgeno alimentario puede provocar síntomas digestivos Un alérgeno alimentario puede provocar síntomas cutáneos Un alérgeno respiratorio puede provocar síntomas respiratorios Un alérgeno respiratorio puede provocar síntomas oculares Un alérgeno inoculado puede dar síntomas cutáneos (caso de DERE, por ejemplo) Y así sucesivamente….
DIAGNÓSTICO
Es difícil cuando los síntomas son inespecíficos, como signos respiratorios o digestivos, y a menudo solo se piensa en cuando se han descartado otras pistas. Es más fácil en casos de urticaria o shock anafiláctico (en este último caso, lamentablemente, el diagnóstico se realiza a menudo post-mortem). El diagnóstico es fundamentalmente clínico y puede utilizarse como prueba de exclusión-reintroducción en el caso de alergia alimentaria. El diagnóstico puede realizarse mediante pruebas cutáneas o análisis de sangre, pero que dan lugar a numerosos falsos positivos y falsos negativos, cuya fiabilidad deja mucho que desear.
TRATAMIENTO Y CUIDADO
El primer paso es eliminar los alérgenos incriminados en el entorno del caballo. Esto es relativamente fácil con una alergia alimentaria. Esto es casi imposible cuando se trata de polen, la exposición se puede reducir "quitando el polvo" del heno tanto como sea posible (el polvo de heno contiene muchos granos de polen). La desensibilización puede ayudar al caballo, pero solo es efectiva si la cantidad de alérgenos involucrados es baja, es imposible desensibilizar a más de 10 alérgenos, como suele ser el caso de los pólenes. Si el o los alérgenos desencadenantes no pueden eliminarse, quedan por tratar las consecuencias, que con mayor frecuencia resultan en tratamientos antiinflamatorios del tipo cortisona, intentando en la medida de lo posible anticipar y reaccionar a los primeros signos para Evite el uso de grandes dosis.
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