¿La dermatitis felina es contagiosa?

La dermatitis, una afección cutánea común en los gatos, no es una enfermedad contagiosa ni mortal para el animal, pero puede resultar especialmente molesta o incluso dolorosa si no se trata rápidamente y con los tratamientos adecuados. De hecho, puede provocar un picor intenso, provocando infecciones secundarias más o menos complejas de tratar. Además, ¡el felino también puede sufrir asma!

Si deseas administrar un tratamiento natural a tu gato, nuestro laboratorio veterinario de fitoterapia te ofrece Labodem Piel, un antihistamínico compuesto por ingredientes 100% naturales. No obstante, antes de nada te aconsejamos que pidas cita con un veterinario para asegurar un diagnóstico correcto.

¿Cómo reconocer la dermatitis en gatos?

La dermatitis felina se puede detectar a primera vista por la aparición de lesiones cutáneas como costras o protuberancias secas (pápulas) en determinadas zonas específicas como las patas, la espalda, el cuello o alrededor de la boca. Además, cuando un gato está afectado, puede intentar aliviar su picor lamiéndose frecuentemente, incluso de forma obsesiva, o mordiendo la zona afectada.

¡Si persistes, esto generalmente provoca la caída del cabello!

Es necesario saber y comprender que la dermatitis es variable. Por tanto, también puede tratarse de una dermatitis atópica, a la que denominamos “eccema atópico”. Esto puede ser identificado por un veterinario durante una consulta de control.

Al igual que en el primer caso, el gato crea lesiones al rascarse. Estos últimos se reconocen por zonas calientes con puntos rojos así como por la aparición de vesículas y costras amarillentas y una capa de caspa en las zonas irritadas.

En los casos de dermatitis crónica, la piel se reseca y el picor vuelve continuamente, pero ten por seguro que es muy tratable.

Labodem Piel, un tratamiento natural para tratar la dermatitis en gatos

Si buscas una alternativa natural para tratar y aliviar a tu gato en caso de dermatitis, te aconsejamos que consultes siempre el consejo del veterinario. Una vez que este profesional de la salud animal pueda confirmarte que es posible administrar un tratamiento con una composición 100% natural, ¡estarás en la mejor posición para pedir Labodem Piel!

En cualquier caso, debes saber que este complemento alimenticio sólo puede ser eficaz sobre la salud de tu animal ya que permite evitar tratamientos que contengan alérgenos que provocan otras reacciones alérgicas. Además, utilizar un tratamiento natural en las dosis adecuadas minimiza considerablemente los efectos secundarios.

Una alergia felina puede provocar importantes problemas respiratorios o incluso convulsiones, no esperes a contactar con un veterinario, incluso si eliges Labodem Piel como antihistamínico natural. Este producto a base de probióticos y silicio orgánico permite que el organismo del animal mantenga un equilibrio para estimular de forma natural su inmunidad y metabolismo.

¿Cuál es la dosis de Labodem Piel?

Si decides administrar Labodem Piel a tu felino, será necesario seguir ciertas instrucciones sencillas pero imprescindibles. De hecho, sea o no un tratamiento natural, se recomienda encarecidamente seguir la dosis indicada, que es de un comprimido al día. En cuanto a la duración de la administración, se recomienda seguir un tratamiento de al menos un mes para asegurar los máximos efectos positivos en el organismo.

Si no ve ninguna mejora o el estado de su gato empeora a pesar del antihistamínico natural, ¡concierte una cita con un veterinario rápidamente!

Advertencia: no olvides que este complemento alimenticio no sustituye las terapias veterinarias ni una dieta sana y equilibrada.

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No contagioso y no tiene estatus de zoonosis., la dermatitis del gato no requiere tomar medidas específicas hacia otros animales o humanos. Si tienes dudas y crees que tu gato está afectado, ¡toma medidas para aliviarlo lo más rápido posible antes de que aparezcan otros síntomas!